Cambio de roles en la virtualidad

Desde mediados de la década de 1990, la educación a distancia ha transformado sus conceptos y formas, gracias a las posibilidades y los retos que proponen las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC).

Estos cambios de paradigma, que han dado lugar a la educación virtual, se pueden resumir en cuatro dimensiones:

• Gobierno.
• Pedagogía.
• Comunicaciones
• Tecnología.

Desde entonces, las cuatro dimensiones de la educación digital (como también es conocida) son objeto de estudio, experimentación y práctica para profesores, investigadores, directivas e -incluso- estudiantes.

En este artículo se identifican algunos cambios de orden pedagógico, puntualmente en los significados y roles que asumen profesores y estudiantes de la era de la información y el conocimiento en red.

El profesor como diseñador

En el e-Learning, el docente tiene la posibilidad de fungir como diseñador instruccional, es decir, estructurar, ejecutar y valorar la ruta de aprendizaje que permitirá el logro de los objetivos o el desarrollo de la competencia a la que apunta el curso.

En algunas instituciones educativas o proyectos de formación empresarial, el diseño instruccional es liderado por un profesional en educación o comunicaciones, que se encarga de asistir en la materia a los demás profesores y tutores.

Sin embargo, exista o no el responsable directo, es recomendable que los profesores dominen y ejecuten acciones de este tipo.

El profesor como storyteller

Además de ser experto temático, el docente busca el aprendizaje significativo en sus estudiantes, es decir, que el conocimiento y la experiencia no se ubiquen únicamente en el estadio del experto sino que fluyan entre unos y otros.

Para ello, el docente puede valerse de actividades que permitan a los aprendices la reflexión crítica, la experimentación en ambientes controlados y la aplicación de lo aprendido en escenarios pertinentes y oportunos.

Todo lo anterior aplica para cualquier modalidad de enseñanza – aprendizaje.

Sin embargo, en el e-Learning se complejiza la situación, pues existen barreras físicas y temporales que retan al profesor en transformar sus estrategias narrativas.

Surge entonces la pregunta: ¿cómo activar la curiosidad y provocar la acción del estudiante desde la distancia?

Técnicas como el storytelling entran en escena y modifican los paradigmas narrativos del docente.

Así pues, la capacidad de «contar e hilar historias» toma especial relevancia en la educación virtual, en un escenario donde existen millones de historias más detrás de una pantalla.

El profesor como comunicador

En la educación digital se aprovechan diferentes herramientas de comunicación para lograr que profesores y estudiantes estén «más cerca».

En ese orden, el docente se configura como un comunicador que gestiona estrategias de interacción sincrónica y asincrónica.

Algunas herramientas son:

• Videollamadas.
• Foros de discusión.
• Blogs.
• Correos electrónicos.
• Grupos de mensajería instantánea.

El profesor como dinamizador

“El profesor, como mediador cognitivo, no debe influir sobre el aprendizaje del estudiante diciéndole qué hacer o cómo pensar, sino que por el contrario, debe ser hecho de tal forma que lo lleve al eje principal del pensamiento. Esto es diferente del modelo socrático ampliamente utilizado en la educación tradicional donde el profesor tiene la respuesta “correcta” y la tarea del aprendiz es adivinar/deducir a través de preguntas lógicas la respuesta correcta.” (Vygotsky, 1978).

Considerando lo que anota Vygotsky, la educación en línea espera que el profesor reoriente su trabajo de «transmisor de información» a «activador del conocimiento».

Para ello es posible utilizar diferentes estrategias didácticas, como:

• Aprendizaje basado en problemas.
• Estudio de casos.
• Aprendizaje entre pares.
• Flipped classroom.
• Gamification.

El profesor digital, entonces, se ubica más allá de la mera exposición de contenidos. Su rol busca proponer conversaciones, reflexiones, debates y encuentros que trasciendan el aula y el ambiente virtual de aprendizaje.

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El estudiante responsable

Por su parte, el aprendizaje digital exige al estudiante:

• Ser activo dentro de su proceso de formación, pues es precisamente él quien determina los momentos y lugares para acceder al conocimiento.
• Dar forma e intensidad a su proceso de aprendizaje, de acuerdo con sus intereses y habilidades.
• Adquirir altos niveles de autogestión y motivación, que deben ser visibles en los trabajos realizados individualmente y  de manera colaborativa.
• Pasar de receptor pasivo de información a sujeto activo y motor de su propia formación, para así poder aprovechar al máximo las amplias posibilidades de acceso al conocimiento que le brindan las TIC.

El estudiante cooperativo

Por otro lado, según Collazos (2001), el estudiante virtual adquiere unas nuevas responsabilidades y características propias del trabajo colaborativo:

• El estudiante debe ser responsable por su propio aprendizaje y, como tal, debe autorregularse. El cumplimiento de los objetivos de aprendizaje está ligado -entre otros- a sus propios significados y metas y estándares de excelencia.
• Como actor autónomo, el estudiante debe estar motivado por la investigación y solución de problemas; así se garantiza que el proceso brinde placer y excitación. En otras palabras, “para estos estudiantes, el aprendizaje es intrínsecamente motivante”.
• Es un actor social. El alumno es responsable de escuchar las ideas de los demás, articularlas correctamente, simpatizar con la comunidad y tener capacidad para la conciliación.
• Por último, es una persona que tiene la capacidad de aprender a aprender (metacognición).

Cualidades del estudiante

Para finalizar, se comparten algunas características y recomendaciones del estudiante en línea.

• Ser constante. Tratar de que el momento del día para estudiar sea siempre el mismo y convertirlo en una cita consigo mismo.
• Buscar un buen lugar para estudiar. Con privacidad, silencio y quietud, para evitar distracciones.
• Generar hábitos de estudio ordenados. Tomarse tiempo para revisar bibliografía, reflexionar, tomar notas (subrayando las ideas más importantes), hacer una síntesis del contenido y consultar las dudas con sus compañeros o el profesor.
• Disfrutar el proceso de aprendizaje. No esperar hasta las fechas límites para comenzar sus trabajos o investigaciones; organizar su ritmo de trabajo para que pueda disfrutar los retos de su curso.
• Ser responsable. La educación virtual requiere un alto componente de responsabilidad frente a las actividades que se proponen en el proceso de enseñanza – aprendizaje.
• Ser disciplinado. Al igual que la responsabilidad, la disciplina en el proceso permite que el estudiante alcance los objetivos que el mismo se traza en su proceso.
• Ser tecnológicamente abierto. El estudiante debe estar abierto a estos nuevos significados, medios y actuaciones.
• Ser un buen comunicador. La comunicación tiene diferentes momentos (sincrónicos y asincrónicos) y medios (multimedia); hay que ser fuerte en el uso pertinente de cada uno de ellos.
• No bajar la guardia. El proceso de enseñanza – aprendizaje virtual exige que el estudiante esté en constante investigación, comunicación e indagación sobre los contenidos.
• Estar convencido. Creer en la metodología virtual, pues de nada sirve no creer en el proceso y sus mediaciones.

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En resumen, los profesores y estudiantes de los últimos 30 años no son los mismos. Los paradigmas, roles y prácticas de la educación, definitivamente, se ha transformado desde entonces.

A modo de crítica, surge la inquietud: ¿por qué se continúa hablando sobre la necesidad de transformar la escuela? Es decir, ¿no hemos sido capaz de «pasar del dicho al hecho»?

Bibliografía

• Vygostky, L.S. Mind in Society: The development of higher psychological processes. Cambridge MA: Harvard University Press. 1978.
• Collazos, C., Guerrero, L., and Vergara, A. Aprendizaje colaborativo: un cambio en el rol del profesor. Punta Arenas, Chile, November, 2001
• Cárcamo, O. La educación virtual y los nuevos roles de actuación docente. Disponible en Orlando Carcamo.com
• El rol del estudiante virtual. Disponible en SlideShare.net
• Universidad Católica del Norte. El perfil del estudiante virtual.
• Chiappe, A. Educación virtual: los cambios en los roles de docentes y estudiantes. Universidad de la Sabana. Área de Informática para la Docencia.

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Por:
Juan Carlos Morales S.
Comunicador y educador
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